El “caso Traven”
Entre las obras que se han publicado sobre Traven, hay que destacar el «retrato» de Michael L. Baumann.
Pepe Gutiérrez-Álvarez Para Kaos en la Red 30-7-2009 326 lecturas 1 comentario
www.kaosenlared.net/noticia/el-caso-traven
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Acantilado acaba de publicar El tesoro de Sierra Madre, la obra más conocida del “enigmático” B. Traven, el misterioso anarquista, indigenista…
Ni siquiera estamos seguro de su nombre, pero se hizo llamar Ben o Bruno Traven, (¿Chicago?, 1890-¿México?, 1969), uno de los «misterios» literarios más controvertidos del siglo XX, de hecho ninguna de las conclusiones que se han dado sobre su personalidad se han visto confirmadas.
Entre las diversas hipótesis que se han barajado sobre él, hay dos que lo vinculan con el anarquismo. La primera lo convierten un tal Ret Marut, actor y escritor alemán de signo stirneriano. Marut había tomado parte en la República de los Consejos Obreros de Baviera que unió a socialistas de izquierdas, espartaquistas y anarquistas.
Una segunda asegura su nacionalidad norteamericana y lo convierte en «un viejo IWW» (“wobblie”)…
Pero lo que está fuera de duda es el contenido «libertario» (rupturita, inclasificable, abierto, individualista que rechaza la fama y las pompas literarias), de su obra, radicalmente crítica del capitalismo y del colonialismo y amante del campesinado y de los pueblos indígenas, animados por la solidaridad y una economía natural.
Su anonimato se explica en función de sus convicciones ideológicas («No es el creador, sino la creación, lo que tiene importancia, y sólo la obra acabada deberá alcanzar la publicidad artística que se merece por lo que ella ofrece de goce (…) ningún artista recibiera más publicidad que la que recibe un obrero de neumáticos»). O por miedo al nazismo…
Fue con el éxito de El tesoro de Sierra Madre (muy reeditada, ahora en una buena traducción de Esperanza López Mateos), y sobre todo, con la famosa adaptación fílmica de John Huston (interpretada por Humphrey Bogart, Walter Huston, Tim Holt).
Entonces el llamado Traven salió del anonimato como autor, sin embargo fue dejando pistas falsas hasta el extremo que uno los últimos investigadores (Jonah Raskin, autor de My Search For Ben Traven, New York, Methuen. 1980), que pensaba escribir -al fin-, una biografía suya, se limitará a escribir un informe abierto sobre el «enigma Traven».
Afincado en México, Traven será considerado, indistintamente, un escritor norteamericano o alemán, siendo a ciencia cierta un autor sobre México, consiguiendo arrancar de un especialista la siguiente afirmación; «…ningún escritor mexicano se ha preocupado tanto de los indígenas, ni ha escrito tantas ni tan bien calibradas novelas en torno a esta humillada, vejada y expoliada porción de la sociedad mexicana». En su novela El general de la selva hace un retrato fiel y entusiasta de un personaje calcado de Sandino.
No fue por casualidad que John Huston lo “descubriera”. La veta libertaria resulta en su caso mucho más explícita que en cualquier otro cineasta norteamericano, John Huston, en una de sus obras mayores, El tesoro de Sierra Madre 1948), sin duda la mejor adaptación cinematográfica de las novelas de B. Traven (que no tuvo demasiada suerte con el cine, ésta ni siquiera es de las mejores de Huston, aunque si de las más famosas, la frase con que el personaje de Bogart se dirige al que interpreta John Huston, ¿Hermano, me das cinco centavos?, fue el título de un famoso documental sobre el cine y la depresión del 29) un escritor de mítica y confesa filiación anarquista, un criterio que no es ajeno a su voluntad de permanecer en el anonimato.
Cuenta como tres trabajadores norteamericanos desesperados, el joven Curtin (Tim Holt), el maduro Dobbs (Humphrey Bogart) y el viejo Howard (Walter Huston, que huyen de la depresión coinciden en la ciudad de Tampico, México, después de una reveladora experiencia laboral, tienen un golpe de suerte con la lotería y apuestan por la intuición y la experiencia del tercero para partir en dirección a Sierra Madre en busca de oro que los libere de tantos agobios. Encuentran un filón, y durante casi un año trabajan muy duro para conseguir una pequeña fortuna pero cuando van a regresar tienen graves problemas. Entre la excesiva ambición de Dobbs, los tropiezos con peligrosos bandidos mexicanos así como la desconfianza entre ellos mismos, hace que todo acabe mal, y el viento acabe por llevarse lo que tanto trabajo les ha costado reunir. Huston escribe y realiza una de sus más características y pesimistas obras respetando la obra original, y contribuyendo decisivamente a la popularización de Traven. En El tesoro...aparece nítida una alternativa social: la de la muy noble e igualitaria comunidad indígena, ajena al afán desmedido de la riqueza y a la guerra todos contra todos que comporta el capitalismo.
Entre las obras que se han publicado sobre Traven, hay que destacar el «retrato» de Michael L. Baumann, Ben Traven. Una introducción (FCE, México, 1978), también se puede consultar el artículo de Jorge Ruffinelli, El misterio de Ben Traven (Quimera, nº 20, 1982). Aguilar publicaría sus Obras en dos tomos, y más cercanamente, La destrucción de nuestro sistema del mundo por la curva del mar (Lucina, Zamora, 2001), con noticia de Luis-Andrés Bredlow, y prólogo de Agustín García Calvo...
Pepe Gutiérrez-Álvarez en Kaos en la Red
Entre las obras que se han publicado sobre Traven, hay que destacar el «retrato» de Michael L. Baumann.
Pepe Gutiérrez-Álvarez Para Kaos en la Red 30-7-2009 326 lecturas 1 comentario
www.kaosenlared.net/noticia/el-caso-traven
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Acantilado acaba de publicar El tesoro de Sierra Madre, la obra más conocida del “enigmático” B. Traven, el misterioso anarquista, indigenista…
Ni siquiera estamos seguro de su nombre, pero se hizo llamar Ben o Bruno Traven, (¿Chicago?, 1890-¿México?, 1969), uno de los «misterios» literarios más controvertidos del siglo XX, de hecho ninguna de las conclusiones que se han dado sobre su personalidad se han visto confirmadas.
Entre las diversas hipótesis que se han barajado sobre él, hay dos que lo vinculan con el anarquismo. La primera lo convierten un tal Ret Marut, actor y escritor alemán de signo stirneriano. Marut había tomado parte en la República de los Consejos Obreros de Baviera que unió a socialistas de izquierdas, espartaquistas y anarquistas.
Una segunda asegura su nacionalidad norteamericana y lo convierte en «un viejo IWW» (“wobblie”)…
Pero lo que está fuera de duda es el contenido «libertario» (rupturita, inclasificable, abierto, individualista que rechaza la fama y las pompas literarias), de su obra, radicalmente crítica del capitalismo y del colonialismo y amante del campesinado y de los pueblos indígenas, animados por la solidaridad y una economía natural.
Su anonimato se explica en función de sus convicciones ideológicas («No es el creador, sino la creación, lo que tiene importancia, y sólo la obra acabada deberá alcanzar la publicidad artística que se merece por lo que ella ofrece de goce (…) ningún artista recibiera más publicidad que la que recibe un obrero de neumáticos»). O por miedo al nazismo…
Fue con el éxito de El tesoro de Sierra Madre (muy reeditada, ahora en una buena traducción de Esperanza López Mateos), y sobre todo, con la famosa adaptación fílmica de John Huston (interpretada por Humphrey Bogart, Walter Huston, Tim Holt).
Entonces el llamado Traven salió del anonimato como autor, sin embargo fue dejando pistas falsas hasta el extremo que uno los últimos investigadores (Jonah Raskin, autor de My Search For Ben Traven, New York, Methuen. 1980), que pensaba escribir -al fin-, una biografía suya, se limitará a escribir un informe abierto sobre el «enigma Traven».
Afincado en México, Traven será considerado, indistintamente, un escritor norteamericano o alemán, siendo a ciencia cierta un autor sobre México, consiguiendo arrancar de un especialista la siguiente afirmación; «…ningún escritor mexicano se ha preocupado tanto de los indígenas, ni ha escrito tantas ni tan bien calibradas novelas en torno a esta humillada, vejada y expoliada porción de la sociedad mexicana». En su novela El general de la selva hace un retrato fiel y entusiasta de un personaje calcado de Sandino.
No fue por casualidad que John Huston lo “descubriera”. La veta libertaria resulta en su caso mucho más explícita que en cualquier otro cineasta norteamericano, John Huston, en una de sus obras mayores, El tesoro de Sierra Madre 1948), sin duda la mejor adaptación cinematográfica de las novelas de B. Traven (que no tuvo demasiada suerte con el cine, ésta ni siquiera es de las mejores de Huston, aunque si de las más famosas, la frase con que el personaje de Bogart se dirige al que interpreta John Huston, ¿Hermano, me das cinco centavos?, fue el título de un famoso documental sobre el cine y la depresión del 29) un escritor de mítica y confesa filiación anarquista, un criterio que no es ajeno a su voluntad de permanecer en el anonimato.
Cuenta como tres trabajadores norteamericanos desesperados, el joven Curtin (Tim Holt), el maduro Dobbs (Humphrey Bogart) y el viejo Howard (Walter Huston, que huyen de la depresión coinciden en la ciudad de Tampico, México, después de una reveladora experiencia laboral, tienen un golpe de suerte con la lotería y apuestan por la intuición y la experiencia del tercero para partir en dirección a Sierra Madre en busca de oro que los libere de tantos agobios. Encuentran un filón, y durante casi un año trabajan muy duro para conseguir una pequeña fortuna pero cuando van a regresar tienen graves problemas. Entre la excesiva ambición de Dobbs, los tropiezos con peligrosos bandidos mexicanos así como la desconfianza entre ellos mismos, hace que todo acabe mal, y el viento acabe por llevarse lo que tanto trabajo les ha costado reunir. Huston escribe y realiza una de sus más características y pesimistas obras respetando la obra original, y contribuyendo decisivamente a la popularización de Traven. En El tesoro...aparece nítida una alternativa social: la de la muy noble e igualitaria comunidad indígena, ajena al afán desmedido de la riqueza y a la guerra todos contra todos que comporta el capitalismo.
Entre las obras que se han publicado sobre Traven, hay que destacar el «retrato» de Michael L. Baumann, Ben Traven. Una introducción (FCE, México, 1978), también se puede consultar el artículo de Jorge Ruffinelli, El misterio de Ben Traven (Quimera, nº 20, 1982). Aguilar publicaría sus Obras en dos tomos, y más cercanamente, La destrucción de nuestro sistema del mundo por la curva del mar (Lucina, Zamora, 2001), con noticia de Luis-Andrés Bredlow, y prólogo de Agustín García Calvo...
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